martes, 15 de julio de 2008

Capitulo 10

Autora: Rosa Ferrer (Venezuela) (1963)
Seudónimo: Garlod.
Publicado: 15/07/08

Pasaban lentamente los días de recuperación de Inés en aquella habitación, pero en su mente otro proceso se iba gestando… tenía que darle su merecido a Rafa, por machista, por patán,… uffff. Estos pensamientos la asaltaban por momentos y cada vez eran más constantes. Al principio le preocupaba y hasta se sentía mal.-Vamos Inesita – se decía – tampoco es para tanto.Claro que si – le contestaba otra voz interior – se merece todo lo peor que puedas imaginar.Pensó inclusive comentarlo al neurólogo que la atendía, pero luego… ya no lo consideró necesario.Mientras todo esto ocurría; Rafa, se desvivía por atenderla, consentirla, mimarla. Sentía muchos remordimientos de conciencia por lo sucedido a Inés.-Diablos… todo salió mal – pensaba mientras miraba a su mujer – solo quería que se preocupara un poco de si misma. Vainas y yo imaginando noches de pasión y mira donde estamos.No sabía por qué, pero cuando Inesita quedaba en silencio y lo miraba, sentía algo extraño, era como si un frío intenso le recorriera el cuerpo hasta helarle la sangre.-Es el sentimiento de culpa que sientes – se justificaba – ella está pasando por un mal momento y yo debo entenderla en todo.Cuando esto ocurría los ojos de ella de repente brillaban, como cobrando nueva vida y una leve sonrisa dibujaba su rostro.Así pasó el tiempo hasta que llegó el día anhelado por todos, el alta de Inés. Ya podía regresar a casa y muy pronto a su trabajo. Cuando el doctor anunció la noticia, Rafa y su mujer se abrazaron con fuerza, con ternura y entrega. Por el rostro de ambos corrían lagrimas de la alegría, de repente ella se separó de él… se limpió el rostro y con un gesto adusto dijo:
-Ya está bueno de tonterías… salgamos de aquí.¡quiero tomar posesión de mi casa.Rafa la miró con incertidumbre y resignado le contestó:
-Si preciosa, ya nos vamos.Acto seguido, salió a ocuparse de los trámites en administración, pero algo le preocupa y no sabe a ciencia cierta, que es.En la habitación ocurría algo que quizás lo habría preocupado aún más… Inés fue al baño a arreglarse y se miró al espejo con temor.“Mírate, mírate, no tienes valor de hacerlo, porque a quien verás será a mi, estúpida. Ya has tenido demasiado tiempo para ti…. Ahora me toca a mi, ya verás que todo cambiará. Jajajaja.”Su cuerpo temblaba, ríos de sudor surcaban su frente. Asustada, se recostó a la pared y se decía: “Dios que me está pasando ahora, estas voces que me atormentan. Pero si digo algo pensarán que estoy enloqueciendo y me dejarán más tiempo aquí.”

1 comentario:

Pamela Rodriguez dijo...

Querida Rosy, me ha encantado tu Capitulo! esta esplendoroso!
gracias por compartir tu arte en letras!
besis
Pamy